El pasado jueves 15 de junio, se presentó en rueda de prensa el estudio “PsiCE, Psicología basada en la evidencia en contextos educativos”, elaborado por Psicofundación y el Consejo General de la Psicología de España.
Ansiedad, depresión, ideación suicida, acoso escolar, ciberacoso… Son vivencias emocionales que los niños y adolescentes españoles están soportando y que no comparten con nadie: ni con sus padres, ni con sus profesores, ni con sus iguales. No cuentan, además, con profesionales de la psicología educativa a quienes recurrir en sus centros escolares y las políticas educativas, sociales y sanitarias actuales no contemplan todas las medidas necesarias para atajar estos problemas.
Los hallazgos encontrados en el estudio PsiCE, ‘Psicología basada en la evidencia en contextos educativos’, elaborado por Psicofundación y el Consejo General de la Psicología de España (COP), sugieren que las tasas de prevalencia de problemas emocionales y las dificultades de ajuste psicológico en niños y adolescentes españoles son elevadas.
Los datos obtenidos así lo reflejan:
- El 12% de los adolescentes manifestaron problemas emocionales y conductuales de cierta gravedad.
- El 6% de los adolescentes informaron de síntomas graves de depresión.
- El 14% de los adolescentes refirieron síntomas de ansiedad graves.
- El 4,9% de la muestra indicó que, en algún momento, había intentado quitarse la vida, mientras un 5,4% presentó un riesgo elevado de conducta suicida.
Eduardo Fonseca, investigador principal del estudio y profesor titular de Psicología de la universidad de La Rioja, añadió además otro dato a este último punto indicando que “las mujeres indicaron mayores dificultades de tipo emocional, ansioso y depresivo y de conducta suicida en comparación con los hombres”.
PsiCE es el mayor estudio realizado en España, hasta ahora, sobre salud mental infanto-juvenil y eficacia de las intervenciones psicológicas en contextos escolares, y en él han participado un total de 8.749 adolescentes, con edades comprendidas entre los 14 y los 18 años, de centros escolares de Asturias, La Rioja, Galicia, Murcia, Andalucía, Valencia, Madrid, y Castilla-La Mancha.
Según sus autores, este estudio, presentado hoy en rueda de prensa en la sede del COP, pone de manifiesto la ineludible necesidad de promover, proteger y cuidar la salud mental durante la infancia y la adolescencia en los entornos educativos.
Además, según expuso Pilar Calvo, coordinadora general del estudio y vocal de la Junta del Gobierno del Consejo General de la Psicología de España, “la promoción del bienestar psicológico y la prevención de los problemas de salud mental en contextos educativos supone la mejor inversión por parte de la sociedad, los gobiernos y las instituciones”.
En línea con esta idea, organizaciones representativas de familias (CEAPA y CONCAPA), estudiantes (CANAE), profesorado (FEUSO, FSIE, STES-i), direcciones de centros educativos (FEDADi) y expertas en la atención psicológica y el cuidado del bienestar de las personas (ANIR, ASITES, ACIPE, Asociación Nacional de Personas con Epilepsia-ANPE y el Consejo General de la Psicología de España) suscribieron, hace poco más de un año, el manifiesto para mejorar el bienestar de la comunidad educativa al que se siguen sumando otras organizaciones.
Este manifiesto, se expuso en la misma rueda de prensa, tiene como objetivos realizar una llamada de atención sobre la problemática psicológica que está viviendo la comunidad educativa, acrecentadas tras la pandemia del COVID-19, reclamando diversas medidas, “como la incorporación de profesionales de la Psicología educativa en los centros escolares”, que estiman necesarias para cuidar mejor el bienestar psicológico y la salud mental de profesorado, estudiantes y sus familias.